Historias de amor


En este día de San Valentín, terminé este libro del que me enamoré a primera vista, en una mesa de saldo y porque estaba barato. Luego me fascinó la forma en que está narrado y porque sin ser una novela romántica (que en general no me gustan) cuenta una historia de amor, de esas que me encantan porque no son melosas ni convencionales ni se circunscriben solamente al amor entre un hombre y una mujer, sino también a la amistad, a la familia y a los valores. 

De yapa, múltiples estilos narrativos, monólogos de humor que me recordaron a Tato Bores, la historia, el cine y el arte de la República de Weimar. 

Una joyita de esas que siempre encuentro revolviendo libros. Un autor multifacético y gran narrador, que aunque la historia se lo permitía,  rara vez dio golpes bajos ni tampoco cayó en los tips básicos de los relatos de la Segunda Guerra Mundial.
Si lo encuentran por ahí,  no duden en leer y disfrutar El último chiste del Gran Jacobi, de Eduardo Goldman. 

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